PARTE DEL PASADO DE LA CIUDAD QUE SIEMPRE ES BUENO RECORDAR

Esta persona quien redacta la nota que compartimos a continuación, hoy no se encuentra en la ciudad de Clorinda, pero le han quedado muy gratos recuerdos de Clorinda y cada tanto suele compartir con gente allegada redacciones en las que justamente hace un repaso de las cosas que anteriormente se encontraban en nuestra ciudad fronteriza, por ejemplo el caso de este amplio galpón que era utilizado por uno de los principales supermercados de la ciudad y que tras la última tormenta sufrió los efectos, les dejamos la redacción de esta persona que cada tanto estará aportando detalles de la antigua Clorinda.

LA DESMOTADORA

Por Ovidio Gómez

La última vez que visité Clorinda, hubo una tormenta fuerte en la zona, que produjo la voladura de techos y otros destrozos.

Ayer recibí algunas fotografías de la vieja planta desmotadora, propiedad en esa época de Bunge &Born, existente en José Fernández Cancio y Paseo Costero.

El recuerdo de esos enormes galpones de chapa está en mi memoria.

De niños, cuando la actividad diaria cesaba, nos acercábamos con Obdulio “Pochi”, FILIPPINI, para ver quien estaba trabajando de sereno en ese momento.

Recuerdo a Don OJEDA, hombre respetuoso y cordial, con quien tuvimos una larga amistad.

Gustaba hablarnos de la caza y de la pesca o mariscada como prefería decir.

También nos permitía recorrer los galpones, algunas veces totalmente vacíos, otras, llenos de bolsas de algodón, y de fardos apilados, constituyendo las “montañas” que escalábamos felices.

Además, como parte de la aventura podíamos bañarnos en las duchas para el personal, de potente y copiosa agua.

También, de los enormes aljibes con agua potable abundante y fresca, nos abastecíamos para el uso diario en nuestras casas, que transportábamos en baldes.

Otros serenos fueron de apellido MARTÍNEZ, padre de Cabito, compañero de escuela, años después, empleado en el Banco de la Provincia de Formosa; Don Leopoldo, y Don QUINTANA.

Hoy ver los efectos de la tormenta y el desmantelamiento de su estructura, nos produce mucha tristeza, pues es el final del testimonio físico de muchas andanzas.

Solo queda en pie, resistiendo a pesar del tiempo, el enorme horno cilíndrico donde eran incinerados los desechos y semillas del capullo de algodón.

La desmotadora propiamente dicha o almarrá era la máquina que separaba rápida y fácilmente las fibras de algodón de sus semillas y otros desechos.

El proceso que realizaban era el desmote, convirtiendo el capullo en fibra de algodón. Luego se empaquetaban el algodón crudo en fardos más fáciles de transportar.

Empleado jerárquico de la desmotadora fue Don ESTECHE, padre de Pirulo, amigo nuestro y quien nos proveía de los enormes bulones con tuerca para hacer estallar la mezcla de clorato de potasio y azufre.

La familia ESTECHE; vivía en la casa del medio (de las tres existentes en esa época, y hoy desaparecidas) en la vereda izquierda hacia el río, sobre calle Chaco.

Las primeras provincias en el siglo XX que comenzaron a cultivar algodón fueron Corrientes, Chaco y Formosa, y era principalmente para proveer de materias primas a la industria textil inglesa.

La Primera Guerra Mundial entre 1914-1919, cerró el abastecimiento normal de telas inglesas a los mercados argentinos y originó la inmigración centroeuropea, que aportaron los conocimientos sobre este tipo de cosechas, y que fue aprovechada y estimulada por el gobierno argentino, para poblar el interior de la provincia.

Durante años vimos a Clorinda ser el portal de ingreso anual, desde Paraguay; de familias completas de cosecheros de algodón, yendo a los lugares de cosecha.

Al término de la temporada, el mercado municipal se saturaba de cosecheros, de manos curtidas y corazones alegres y ávidos compradores, con plata blanda y mojada de luna y sudor, al decir de la canción. Entre los comerciantes de esa época recuerdo a Ramón Donato “Croque”, VALDEZ vendiendo las Radios a pilas; rústicas; de plástico.

Arrasaban con todas las unidades, al punto que, en cierta ocasión, solo le quedaba una radio que se encontraba en reparación y tuvo que argumentar mucho para explicar la imposibilidad de su venta.