MALESTAR DE LA COMUNIDAD CLORINDENSE POR FALTA DE AGUA EN LAS REDES

El personal del Servicio provincial de Agua Potable viene haciendo hasta lo imposible por tratar de mejorar el servicio de agua de la ciudad de Clorinda pero es real y el propio responsable del SPAP en Clorinda, lo manifestó, la demanda supera la capacidad de la actual planta potabilizadora, las altas temperaturas generan que exista más demanda que lo habitual de otras temporadas y lamentablemente aquellos barrios más alejados de la zona de la planta ya se hace difícil que puedan recibir agua por red, ante esto se adoptan medidas a fin de intentar cubrir mínimamente la necesidad pero resulta imposible llegar a todos lados, tanto el SPAP como el municipio clorindense tienen camiones cisterna a su cargo que realizan al menos un par de recorridas por turno y aun así no se puede cubrir la necesidad existente. En ciertos barrios existen tanques comunitarios desde donde se proveen del vital líquido pero existen otros como los barrios más alejados que dependen del servicio de red no que los camiones les acerquen el agua.

Ya desde hace tiempo para tratar de que algunos barrios puedan tener el servicio se implementa un sistema de cortes programados y con eso se intenta llegar a algunos sectores más alejados pero tampoco con esa forma pueden recibir el vital líquido por red, existen también mucho inconvenientes que ya escapan a la gente que está encargada del tema de la distribución, muchos domicilios estarían conectados a la red con motores que hacen que justamente el servicio pierda presión y no llegue a otros puntos, tantas son las cosas que afectan a la comunidad que reclama a gritos una solución definitiva, la única solución definitiva por el momento se encuentra paralizada, se trata de la obra de la nueva planta que según datos extraoficiales podría volver a reactivarse para el mes de marzo aunque esto no es seguro pero de ser así demandaría un buen tiempo más su conclusión, no solo por este párate sino también por los retrasos que tuvieron en su momento por la crecida del rio. Mientras tanto la gente pide encarecidamente poder tener un poco de agua en sus canillas para cargar sus reservorios, algo tan esencial como el agua hoy es un privilegio en Clorinda.